Ana Cáceres, presidenta de la Federación Argentina de Graduados en Nutrición (Fagran) calificó de “modelo” la norma de Etiquetado Frontal que recientemente se reglamentó en Argentina.
En No Corras, por FM 97 UNE, la profesional de la salud destacó: “Estamos muy contentos. Tenemos una ley modelo de promoción de la alimentación saludable en la región”.
Càceres explicó que la norma “es integral porque no sólo abarca el etiquetado frontal sino que también regula la publicidad, promoción y patrocinio de los alimentos que contengan sellos y la promoción de entornos escolares saludables”.
“Hay que festejar, celebrar que en Argentina hubo este consenso para construir una ley de semejante envergadura. Pues, vamos a tener la posibilidad de estar más informado. Van a ir apareciendo los sellos. Vamos a poder elegir los alimentos con la garantía de saber que contienen” destacó y agregó que en un primer tiempo “nos vamos a encontrar con una gran cantidad de alimentos con sellos. Pues, los supermercados venden alimentos envasados que son factibles de tenerlos. Pero, también habrá otros alimentos más saludables. Es decir que si bien hoy, estos alimentos, tienen menos presencia en los supermercados, vamos a tender a que las góndolas no estén repletas de alimentos ultraprocesados”.
La nutricionista detalló que la autoridad de aplicación, en principio, está mano del Ministerio de Salud de la Nación. Pero, además actuarán el ANMAT y la ENACOM “en la regulación de la promoción y el patrocinio de los alimentos. Y en el de capítulo de entorno escolar, se contará con la participación del Ministerio de Educación de la Nación y el Consejo Federal de Educación que deberá coordinar con las carteras de educaciónprovinciales”.
Cáceres explicó que “los sellos van a indicar excesos en los nutrientes críticos: Azúcar, grasas saturadas y sodio “ya que consumidos en exceso producen un daño en la salud”. Además, la norma contempla un sello de exceso en calorías, que estará atado a otro nutriente crítico que aporte calorías. Y, también se deberá declarar si el producto contiene edulcorante y / o cafeína”.
Además, la profesional de la salud detalló que el objetivo final de la norma es que los productos se referencien con “el límite recomendado por OMS” y destacó que la implementación se hará en dos etapas.
La primera tendrá un “límite un poco más laxo” en cuanto a los porcentajes a cumplir y además las empresas grandes tendrán un plazo de 9 meses para su implementación, y las PYMES contarán con 15 meses. En una segunda etapa, se pedirá llegar a los porcentajes exigidos por la OMS y de nuevo las grandes empresas contarán con 9 meses para adaptar la producción y las pymes 15.
Finalmente, Cáceres destacó que todavía queda mucho trabajo por delante ya que hay mucha reglamentación en las provincias que necesitan un trabajo más profundo a nivel nacional y con las provincias. Y por ello le pidió a la sociedad toda que “tome como propia esta norma”.
Pues, “los grandes medios van a intentar desprestigiar la ley, los sellos y van a intentar poner frenos a la implementación de todos los capítulos que faltan. Y al mismo tiempo, en todo este proceso, la industria va a querer meter la cuchara y la mano” concluyó la nutricionista.