En diálogo con 'Revolución Solar', el actor y cantante pamplonés Ángel Ruiz señaló que "no esperaba tanto cariño, aceptación y reconocimiento como el que hemos tenido. En principio venía para hacer tres funciones y hemos tenido que ampliar debido a la afluencia de público. Me voy haciendo cinco funciones y con la idea de volver en febrero y marzo del año que viene a hacer temporada aquí. Estoy feliz y henchido de amor por esta tierra y su gente."
"Buenos Aires es la capital del teatro en Latinoamérica. La cantidad de teatros y espectáculos que hay es impresionante. Venir aquí es muy emocionante para mí porque es encontrarme con todo lo que me ha influido a lo largo de mi carera."
Sobre su trabajo en este unipersonal, Ángel Ruiz explicó que "parto de la vida y obra de Miguel de Molina. Fue un exiliado español perseguido por el franquismo por ser homosexual y republicano. Él viaja a la Argentina y vive 50 años en este país. Aquí consiguió el éxito pero siempre vivió con la amargura de no ser querido y reconocido en su tierra. Yo empaticé con ese dolor y he querido, a través de su historia, seguir indagando y poniendo el dedo en la llaga para no caer nuevamente en eso. La función quiere denunciar todo esto y rescatar la empatía del público para no olvidar la historia, porque si la olvidamos, lamentablemente podríamos repetirla".
Por último, Ruiz expresó que "el unipersonal es muy difícil porque hay que tener un reloj interno. Ese reloj es el va midiendo constantemente el paso y el ritmo de la función. Es como que hay un director dentro de uno. Creo que ésa es la dificultad más grande de un unipersonal."