Vanessa Ragone, actual presidenta de la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica conversó con 'Club Lumiere' y se refirió a la reciente salida de Luis Puenzo y su gestión como titular del INCAA: "la visión de todo el sector audiovisual era que las políticas del Instituto de Cine no estaban a la altura de las necesidades, ni sucedían con la velocidad que se requiere, pensando en que hemos pasado una pandemia y hemos tenido que impulsar una actividad que sufrió muchísimo por el aislamiento. Todos teníamos un consenso de que la gestión de Luis Puenzo no daba las respuestas que necesitábamos."
Acerca de la decisión de reemplazar a Puenzo por Nicolás Batlle, vicepresidente en ejercicio del INCAA, Ragone sostuvo que "es una medida lógica en momentos en que hay que tomar decisiones muy rápido. Siento que hemos perdido mucho tiempo con todas las cuestiones sucedidas con Puenzo. También está la línea administrativa: hay muchas películas en rodaje, en pos producción y otras actividades que tienen que suceder. Si se corta esa línea administrativa, hasta que llegue un nuevo presidente o presidenta y visualice o entienda de qué se trata la gestión del Instituto, eso puede llevar a un 'parate' mucho peor. Por eso, considero que es una decisión correcta."
Vanessa Ragone, quien además es productora y directora de cine y televisión, reflexionó sobre la actividad cinematográfica actual, haciendo hincapié en el rol del espectador: "en muchos lugares del mundo los espectadores han vuelto y con bastante masividad. Las plataformas crecieron durante la época de la pandemia, y ser espectador en casa, es una actividad mucho más usual ahora que hace dos años. Sin embargo, la experiencia cinematográfica sigue siendo motivadora y muy interesante, por eso creo que se va a recuperar. Para que eso suceda hay que poner de todos lados. Eventualmente, limitar la cantidad de salas que a veces se concentran en una sola película, dar más espacio a la producción nacional, tener más salas, precios promocionales para la gente; hay muchas maneras de reactivar el disfrute del cine. Es un proceso lento que tiene varias aristas complejas."
"He trabajado con las plataformas de muy diversas maneras. Dentro de una idea de política audiovisual está buenísimo que las plataformas produzcan. La continuidad de trabajo es fundamental para nuestra actividad. Nuestra primer película con plataforma fue una coproducción entre nosotros y Netflix. Todo eso es trabajo y es bienvenido", remarcó.
Con respecto a la relación del público con el cine, la responsable de la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica indicó que "hay algo, cierta mística en el cine nacional, cierta alegría de ver a tus actores, que pienso que se puede recuperar. Por ejemplo, algo de eso pasa con la televisión y las ficciones. Hacía mucho tiempo que no había ficciones, series o novelas en la tele. Empezaron a aparecer hace muy poco, post pandemia, y son un éxito de público impresionante. Cualquiera hubiera pensado que eso estaba muerto en la tele y sin embargo no lo está. Por eso digo que no creo que el cine esté muerto ni mucho menos."
Para finalizar, Ragone habló sobre 'El fotógrafo y el Cartero', el documental sobre el asesinato de José Luis Cabezas ocurrido en 1997: "presentamos en el BAFICI (Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente) el documental que hicimos con Alejandro Hartmann. Es un tema que me toca muy de cerca porque mi padre era fotoreportero y mi madre periodista. El crimen de Cabezas fue algo que nos atravesó mucho familiarmente. Después de mucho tiempo de investigación y hacer contactos logramos filmar la película, hacerla y presentarla en BAFICI. Felizmente Netflix también se interesó por el documental y eso es muy bueno porque esta historia debe trascender".