Indicó que actualmente la Colectiva integrada por arqueólogas, antropólogas y comunicadoras busca romper la lógica de la investigación tradicional planteando nuevas hipótesis y medidas de pruebas.
En este momento, se encuentran trabajando en la búsqueda de Guadalupe Belén Lucero Cialone, la niña que fue vista por última vez hace 10 meses en un barrio de la ciudad de San Luis y del joven Tehuel de la Torre.
Perosino explicó que, al momento de pensar en las responsabilidades, "una parte puede ser responsabilidad de los medios y otra de las agencias que intervienen en la búsqueda respecto a las estrategias que se arman".
En ese sentido, expresó que "esta masificación de las desapariciones genera hipótesis sobre lo sucedido, que no puede comprobarse sobre el expediente, redundando negativamente sobre la familia".
Para la antropóloga, “siempre es una buena práctica difundir la fotografía, y la mejor forma de abordarlo es con mucho respeto, a través de los comunicados oficiales, que las Fiscalías y los Juzgados ponen a disposición, porque la información que circula en los medios de comunicación dista de lo que sucede".
Al momento de ejemplificar un caso, brindó detalles sobre un tema específico en nuestro país con la ley de trata del 2012. "Es un ejemplo recurrente que damos, muchas de las desapariciones se empezaron a investigar como trata pero una gran parte terminaron siendo femicidios en contextos de violencia doméstica".