Carlos Abad, de la Mesa Nacional de la UTEP e integrante de la Federación Pesquera Argentina señaló que hoy se movilizan “entre 30 y 50 embarcaciones” de todo el país para pedir políticas públicas para el sector.
En Siete Colores, por FM 97 UNE el representantes de los pescadores artesanales aseguró que se reúnen en el Congreso de la Nación para “llenar de contenido identitario y simbólico el reclamo de los trabajadores que lleva adelante una tarea ancestral” y para exigir que se ponga en discusión la Ley de Pesca Artesanal en el Congreso.
“Esta movilización se da en el marco de la Ley de Tierra, Techo y Trabajo” detalló Abad y aclaró que lo que se busca es "poner en relieve la existencia de la pesca artesanal, las condiciones de trabajo, las condiciones de vida de sus trabajadores y la necesidad de dotar de políticas públicas al sector, fundamentalmente en el momento que atraviesa el país”.
Abad reiteró: “Vamos a estar con las canoas, las mallas, los compañeros con las botas y las boinas, tal cual sucede en lo cotidiano, para elevar las demandas históricas del sector al Congreso” . Y destacó que le llevan a los legisladores nacionales “una propuesta legislativa que tiene 4 pilares. La creación de un registro nacional de la pesca artesanal, de terminales pesquera, que son centros de procesamiento y elaboración, agregado de valor y acopio de la producción; de Consejos de Cuenta y un fondo de fomento para el fortalecimiento de la producción cooperativa de la pesca artesanal”.
Seguido el representante de los trabajadores pesqueros describió que “sólo en la provincia de Santa Fe son 10 mil las familias que se dedican a esta actividad” y aseguró que “están asfixiados por un puñado de frigoríficos que exportan y por un negocio piramidal que le paga menos al que más labura”.
En ese marco aseguró que “hay que pensar modelos alternativo de comercialización porque en la actualidad no hay ningún reconocimiento laboral ni social para los pescadores. Al laburante se le paga entre 30 y 140 pesos el kilo de Boga mientras que en el mercado está más de 1200 pesos”.
Es decir que los pescadores realizan “jornadas interminables de trabajo para tener ingresos que no alcanzan a comprar ni medio kilo de milanesas".
Finalmente, Abad denunció que los pescadores están presos de un “un modelo extractivista y de saqueo de nuestro suelo” ya que “Argentina es uno de los pocos países que exporta pescado salvaje”.
“80 por ciento del recurso del río se exporta. Y solo un 20 % queda para el mercado interno. Pero además los frigoríficos pretenden ganar lo mismo. Es decir que no es que no hay consumo sino que cobran precios extraordinarios y pese a eso el producto no se puede conseguir” concluyó.