En el séptimo aniversario de la primera marcha "Ni una Menos", Ariel Sánchez, director de Promoción de las Masculinidades por la Igualdad perteneciente al ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual bonaerense reflexionó sobre el rol de los varones.
En Siete Colores, por FM 97 UNE, el funcionario del ministerio que encabeza Estela Díaz aseveró que el mayor desafío es poder ver “cómo se dan situaciones cotidianas, y muchas personas que hemos sido educadas dentro de los mandatos hegemónico de las masculinidades, no registramos como violencias”.
Sánchez explicó que desde la dirección apuntan a que “nos solamente deje de ejercer violencia quien lo hace continuamente, sino que haya involucramiento de muchos varones en el cese del ejercicio de las violencias en general”.
“Transformémonos en el molesto del grupo de trabajo. Que no sean sólo las pibas las que se organizan en una comisión de género. No es una cosa solo de ellas”, puntualizó el funcionario y agregó que “la dimensión política” de la dirección que tiene a cargo es “poner en evidencia que las políticas de género son universales. Son políticas de inclusión y de justicia social en términos generales, y no responde a las políticas de un sector de la población”.
Explicó que todo esto se debe a que, “hacer políticas de género, construir ambientes libres de discriminación y violencia, y promover mayor igualdad de género y mayor relación con el cuidado nos da una vida más libre y más digna a todas las personas”.
Asimismo, Sánchez aseguró que hay que “desplazarse” del modelo de educación patriarcal e “involucrarse en las políticas de igualdad de género" porque eso también "salva la vida de los propios varones que hoy se mueren por culpa de los mandatos de esas masculinidades”.
“Hay que empezar a legitimar las políticas de género en clave universal y hay que empezar a ver qué dimensiones nos toca, como varones, en todo esto”, subrayó el director provincial, y aclaró que el lugar de los hombres “no es simplemente salir a lo público a acompañar una lucha porque sino siempre nos terminamos poniendo afuera de la estructura de violencia”.
Finalmente, en ese marco de análisis, reflexionó sobre la implementación de dispositivos tecnológicos como el Botón de pánico que se le da a las víctimas o la tobillera electrónica, que se le pone a un varón denunciado.
“Como medidas de protección urgente, sirven. Pero es importante el trabajo con los varones denunciados. Porque muchas veces un mismo varón es denunciado por muchas personas. Y, esa situación se resuelve, en principio, con un botón o una tobillera. Pero, cuando la situación se resuelve con una medida perimetral, que es para la víctima; el agresor no reconoce su responsabilidad. Y entiende que está en esa situación porque lo denunciaron, no porque ejerció violencia” aseguró y por eso reiteró la importancia de seguir “promocionando la línea abierta que tiene la provincia para estos casos y al mismo tiempo seguir abriendo espacios de encuentro para los varones que ejercen violencia”.