En 1989, Fabbri se incorporó a Torneos y Competencias. En el 2002 la fusión de los programas Fútbol x 2 y ABC Diario quedó en el centro de la escena en Estudio Fútbol hasta fines de 2013, con diversos acompañantes. Desde febrero de 2016 conduce y realiza el editorial principal de "Sportia", el noticiero deportivo de TyC Sports. Actualmente escribe en la página web "tycsports.com" y en la página deportiva del diario Perfil (442.perfil.com). Hasta el momento ha publicado nueve libros.
En diálogo con el Deportivo 1270 volcó su opinión acerca de la profesión. "Nosotros por encima de todo somos periodistas, hagamos fútbol, policiales o notas de color. Creo que en el fondo la caracterización del 7 de noviembre como ia del periodista deportivo partió de alguien que despreciaba el periodismo deportivo y que lo quiso separar de los que es la actividad periodística, en el fondo la estructura de la noticia sigue siendo la misma".
"A veces uno tiene que trabajar, aunque no le guste en un determinado lugar porque tiene que vivir de algo y se han cerrado puertas. En una época cuando echaban algún periodista más joven de un medio les decía "felicitaciones, te recibiste de periodista". Nos ha pasado a tantos, es una tarea donde no podemos poner una oficina, un consultorio, un despacho, somos periodistas y somos trabajadores de prensa" agregó el periodista.
Fabbri da su parecer acerca de la carrera desde dos puntos de vista como profesional y profesor. " Hoy espero que los que lleguen lo hagan por vocación, que no pase como en los ´90 que se puso de moda y algunos te decían que querían ser famosos, y quiero salir en la tele. Digamos todo eso ojalá desaparezca. El tema del estudio está como subvalorado, no debe ser un problema sólo de la Argentina, pero en el periodismo hay muchìsima demostraciones de gente que está en determinados lugares, gana mucho dinero y no hace periodismo".
"Me parece que uno tiene que tratar de trabajar de periodista desde todos los ángulos posibles. Lo ideal sería escribir bien, para eso hay que tener una determinada formación, tiene que saber expresarse bien, poder pararse delante de una cámara y poder escribir en internet y manejar las redes sociales. Me ha tocado, por la edad que tengo, atravesar todas esas cosas. En el año ´80 cuando trabajaba en Clarín con 23 años escribía en una máquina de mi viejo y había estudiado dactilografía en el colegio secundario y en el diario tenía que escribir con tres carbónicos, darle el original al jefe de la sección, al editor y después tenías que ir al taller con una pinza de depilar donde tenías que sacar el plomo caliente. De ahí a esto de hoy hay una distancia absolutamente gigantesca y hay que saber hacer un poco de todo. Hay que ser todólogos y me quedó el déficit de no saber bien idiomas, puedo hablar en inglés algo y si la cosa se profundiza no puedo y no hablo otros, salvo el español. Son asignaturas pendientes" sostuvo el reconocido periodista.
"A los chicos hay que pedirles que sepan programar, varios idiomas porque eso los va a ayudar y si se puede que estudien otra carrera que tenga alguna conexión con el periodismo. A futuro no sabemos que va a pasar con el periodismo porque van desapareciendo los medios escritos, cada vez peor y más inexorable esto. La gente menor de 40 años casi no lee".
Por último Fabbri habla desde la docencia. "Me tocó trabajar de docente toda la década del ´90 y la primera de este siglo en Deportea y había y una cola de chicos para anotarse y parecía que habían llegado los Rollings (Stones) y me pasó con varios que confundían que les gustaba el fútbol con el periodismo y vos les decías que no era lo mismo y a propósito generábamos ejercicios y los sacábamos a la calle donde no hablaran de deportes y de paso entendieran que el periodismo no es fútbol solamente. Se necesita de cierta formación".