Rozanski afirmó por Radio Provincia que “Etchecolatz se jactaba pero no reconocía nada, tenía una actitud desafiante.Para los crímenes más graves hacía falta esa personalidad”.
Y remarcó quien fuera presidente del tribunal que condenó a Echecolatz que “se le probaron centenares de secuestros, muertos y hechos probados con los delitos más graves. La idea fue ponerle el máximo de pena”.
En ese sentido, el entrevistado recordó que “la expectativa en esos juicios eran obtener la información necesaria y conocer la verdad. Yo mucha no tenía porque se veía esa actitud de Etchecolatz “
Asimismo el ex magistrado mencionó las condenas y puntualizó que “en el 2006 pongo por escrito que no puede pasar un día fuera de la cárcel y de hecho sucedió. El genocida no puede estar en libertad y le negué la prisión domiciliaria”.
Rozanski precisó que en 2014 en unos de los juicios contra el represor contó que “me mostró un papelito y quería que yo le acepte, pero no lo hice, porque era una provocación, decía Jorge Julio López con un mensaje que nunca vamos a saber”.