La Alcoholemia Federal ya cumplió 19 ediciones consecutivas, resultado del trabajo en conjunto con las distintas jurisdicciones del territorio nacional para controlar y desalentar el alcohol al volante.
Pablo Martínez Carignano, director Ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, indicó que se trata de un programa que comenzó en "diciembre de 2020 con el objetivo de que tanto Nación, como las provincias y los municipios salgamos a la ruta en una ocasión determinada por mes para controlar el alcohol al volante. Al margen de los controles que cada distrito hace de manera rutinaria, queríamos una jornada especial para hacer controles grandes, compartir datos y hacer una radiografía de cómo está la situación en nuestro país".
En ese sentido, comentó sorprendido a La Mecha por Radio Provincia que el dato inédito muestra que las cifras en materia de seguridad vial "se han mantenido. Van 19 meses consecutivos, los resultados son buenos. En diciembre de 2020 había un 8% de positivos, es decir, con alcohol en sangre por encima de lo tolerado y la última edición, realizada el mes pasado, cerró con un 2%. El promedio general es de un 4% de gente alcoholizada al volante".
"En los meses de verano y vacaciones de invierno estas cifras suben", reconoció y agregó que los controles generan un efecto inmediato en la conducta de los conductores. Aún falta muchísimo para que sea internalizado como 'no tomo alcohol porque es peligroso, está mal', seguimos en la etapa del cálculo de probabilidades de si me van a controlar o no. Por eso es fundamental que cada vez más gobernadores e Intendentes tomen el compromiso de ir contra este tema. El alcohol está presente en 1 de cada 4 muertes por hechos viales, tiene un impacto enorme en términos de salud y, además, la inseguridad vial es la principal causa de muerte en menores de 35 años. Es inevitable darle pelea" subrayó el funcionario.
En la misma línea, advirtió que "el promedio de alcoholemia positiva en los casi 150 casos que hemos testeado fue de 0.86 y lo tolerado es 0.50. Está muy cerca la graduación recurrente de lo permitido lo que demuestra que ese 0.50 es un error porque se cree que es una graduación segura y no es cierto. Es momento de replantearse, como están haciendo el Parlamento nacional y bonaerense, si podemos seguir teniendo el límite de 0.5 con estos resultados y cuando países limítrofes tienen límite cero y 9 provincias argentinas también tienen limite cero. Es momento de que la sociedad debata, a través de sus representantes, si vamos a seguir así o vamos a hacernos cargo de que el alcohol al volante mata y que la única graduación segura para manejar es cero".
No obstante, Carignano sostuvo que "este viernes viajo a Mendoza a reunirme con Coviar (Confederación Vitivinicola de Argentina). Es gente que defiende sus intereses, pero con la que se puede dialogar. Estoy convencido de que vamos a llegar a un acuerdo, porque tanto los productores como nosotros queremos un país seguro con menos dolor en las rutas".
Sin embargo, reconoció que "el consumo no baja cuando hay alcohol cero". Por tal motivo, citó como ejemplo el caso de Uruguay, quienes desde 2017 incorporaron el alcohol cero y, desde entonces, "bajaron un 40 % los siniestros graves con alcohol en sangre, pero el consumo no bajó nada. No se busca un Ley Seca, que vivamos en un país abstemio, solamente se busca que quien maneja no tome".
"Cuando se dispuso no fumar más en bares y restaurantes había voces que se levantaban diciendo no viene un tipo más a un bar. Y no pasó eso, hoy en día los bares son libres de humo y ya no volveríamos atrás. No buscamos ir en desmedro de ninguna industria, el vino es industria nacional, hay gente que vive de eso y está perfecto. Solo decimos que un país con 2000 muertos por año por manejar alcoholizados tiene que revisar su normativa", afirmó.
Además, explicó que "existen dispositivos para el control de sustancias psicoactivas que se utilizan después del hecho, como se hizo en el día de ayer con Ricardo Iorio en Bahía Blanca (el cantante chocó contra una columna de alumbrado público y fue sometido a un test de alcoholemia y de drogas que dieron positivos). Antes se hacían controles aleatorios, alguna Provincia lo hace, pero son productos importados, los reactivos son importados. Se hace para casos muy focales, pero no se hace actualmente en las rutas".
Para terminar, retomó el accidente de Ricardo Iorio y expresó que su licencia está radicada en la localidad de Guatrache, La Pampa, que está margen de la Licencia Nacional de conducir y por ese motivo "se le pidió al Ministro de Seguridad de la Provincia que solicite la suspensión preventiva de la licencia para someterlo a un nuevo examen con especial énfasis en consumos problemáticos. El sistema nacional de Licencias de Conducir ofrece garantías respecto de la evaluación del aspirante a una licencia y las localidades que quedan al margen en muchos casos suelen ser laxas. Por eso necesitamos que eso se revise".