En diálogo con Hijos de 30Mil, por FM97 Une, dijo que el proyecto consiste en “una performance que creamos junto con mi prima Laura Kalauz” porque “siempre quisimos trabajar juntas, nos atraviesa la historia en común”.
El puntapié inicial “tiene que ver con mi doctorado, cómo el teatro trata el tema de los desaparecidos y cómo es esta acción del fantasma, que nos vienen a comunicar”.
A su vez, manifestó que “tenemos la sensación de que esto recién empieza, de que va más allá y que tiene que hacerle lugar legítimo a cómo nos acompañan esas ausencias. Me parece que esta bueno comparar y escuchar a lo que cada uno le dicen los muertos y eso interesó más de lo que yo creía”.
“A mí me cuesta entrar a la ESMA y eso tiene que ver con mis propios fantasmas, siempre fue difícil entrar, pero vuelvo. Yo, pensaba antes para qué lado resonaba en el lugar, y pensaba en que puede ser en cualquier lugar porque no tenemos cuerpos, están desaparecidos y entonces, están en todos lados”.
En cuanto a los discursos de odio, manifestó: “Me parece q este contexto nos obliga a pensar nuevas formas de hacer memoria, con gente más joven, donde los discursos negacioncitas están presentes. Es urgente revisar de qué modo contamos la historia. Me parece re valioso que con esta obra hablemos de memoria y olvido”.