Natalia Salvo, abogada y docente universitaria repasó las fotos que muestran al fiscal y al juez de la causa Vialidad, que investigan a la vicepresidenta Cristina Fernández, jugando al fútbol en “Los Abrojos”, la quinta del ex presidente Mauricio Macri y aseguró que eso atenta contra “una de las garantías constitucionales: que te juzgue un juez imparcial”.
En No Corras, por FM 97 UNE, explicó que “la República es, ni más ni menos, que la separación de los poderes y una de las garantías constitucionales es que te juzgue un juez de manera objetiva y en base a pruebas concretas”.
Pero, “la existencia de fotos de estos jueces, fiscales y camaristas, que tienen bajo su mando la causa Vialidad, en la quinta del expresidente Mauricio Macri, principal opositor político de Cristina Fernández, mientras se desarrollaba esta causa, vulneran y violentan el criterio de juez imparcial. Y por ello la defensa de la vicepresidenta pide la recusación” de esos funcionarios judiciales, describió.
Seguido, Salvo aclaró que esta presentación no es “antojadiza” sino que se hace a partir de “pruebas documentales” que acreditan “como dice el código penal” que hay “una clara situación de amistad con algunas de las partes”.
Además, la abogada explicó que lo establecido por el Código no solo “aplica al juez (Rodrigo Giménez Uriburu) que es el encargado de dictar sentencia sino también al fiscal que es el encargado de acusar y de representar la legalidad y los intereses del pueblo, algo totalmente contrario a lo que hizo el fiscal (Diego) Luciani” en esta causa.
“El fiscal cuando acusa, no tiene que hacer un monólogo político, eso lo tiene que hacer en su grupo de amigos. Y lo que tiene que hacer es una acusación y determinar la participación de Cristina Fernández en la sociedad ilícita o en defraudación al Estado por la construcción de estas obras en Santa Cruz. Y eso lo tiene que hacer con testigos, con auditorías y pericias”, puntualizó la letrada.
Salvo denunció el impacto que tiene “la persecución judicial, más conocida como Law Fare o guerra jurídica en las democracias de Latinoamérica” y remarcó que “en el diseño del Estado Moderno integrado por tres poderes que se compensan, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, los grandes poderes económicos, concentrados y corporativos han encontrado en este último una terminal para poder sellar sus propios intereses”; ya que “que tiene integrantes vitalicios, no son elegidos el pueblo y no tienen auditoría”.
Por consiguiente destacó que para poder evitar los contubernios es importante empezar con una Reforma Judicial que debe ser “ mediata y depender de varias dimensiones”.
"Primero hay que visibilizar quienes son los jueces de la Corte Suprema, y cuál es la importancia de las acciones del Poder judicial para todos los argentinos. Este poder debe ser interpelado por el pueblo porque es el menos democrático de todos", aseguró y advirtió que "mientras esto no ocurra", va a ser más fácil el statu quo se mantenga.
Finalmente agregó que "hay que hacer una profunda reforma académica, porque son los abogados y abogadas los que conforman este Poder judicial, lejano de la sociedad. Y muchas veces las currículas universitarias están hechas para parir abogados de negocios y no abogados por la justicia social. Y también hay que trabajar la dimensión política y legislativa porque las realidades no cambian por las leyes pero sí son el punto de llegada".
"Es importante que participe esa triada para la reforma judicial porque sin participación social el autoritarismo, la displicencia y el despliegue del Poder Judicial va a ser cada vez más grande" afirmó.