Bernabé explicó que "lo que vivimos en Rosario y en el sur de Santa Fe es una tragedia ambiental sin precedentes".
Ello ha provocado que en las últimas semanas "en Rosario haya habido personas asmáticas fallecidas, debido a los niveles de contaminación del aire, niños que desarrollaron problemas respiratorios que antes no tenían y una enorme cantidad de alteraciones de salud de la población en general".
En ese sentido, la militante por la Ley de Humedades enfatizó que como consecuencia "sabemos que a la larga podemos llegar a padecer cáncer de pulmón".
Porque "más allá de lo sanitario, hay una devastación ambiental, se quemó más del 50 % del Delta del Paraná, vamos cerca del millón de hectáreas, con una baja enorme de la biodiversidad".
Hoy "tenemos que trabajar para ordenar el territorio, se gastan millones en combatir incendios, pero no se pone un peso en el control del territorio que está siendo literalmente rifado a la producción".
En esa línea, destacó que "hay un discurso que dice que si entregamos la tierra a la producción , la vamos a poder controlar mejor, y porque donde hay ganadería hay desmonte, por lo cual los incendios son fácilmente controlables. Hay un discurso que dice que matemos al humedal porque así no tenemos más humo".