Diego Ardiles nació en 1979 en Pehuajó, provincia de Buenos Aires., es fundador y editor del sello "Indómita Luz", docente de literatura en escuelas de la ciudad de Buenos Aires, militante del Movimiento Evita y de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular.
"La vida no necesariamente tiene que ser dejarlo todo por acompañar una idea política, cada uno con lo que puede o lo que puede lo da. Me parece que la militancia se trata un poco de eso, de la decisión de hacer un espacio en la vida que cada uno lleva para darlo por algo mas grande que nosotros y en colectivo", reflexiona Diego sobre la militancia política. Y agrega: "No soy ni joven ni militante, fui llevado a la militancia por alumnos míos. Siendo docente de literatura es bastante transversal, el análisis de discurso está ahí dando vuelta, se puede usar la materia para desmadejar los discursos que algunos chicos traen de la casa o de la televisión, eso puede ser una forma de militancia, que no es adoctrinar".
"En 2013 ya era un tipo de treinta y pico, ya se veía resquebrajarse el Frente Para la Victoria, se había ido el massismo y todos veíamos venir lo que después pasó que fue el triunfo de Macri. Yo era el mas grande de mi grupo, mi responsable tenia 22 años. Al ser mas grande me empezaron a ofrecer hacerme cargo de algunas políticas de mas responsabilidad", detalló.
Al ser consultado sobre la lucha armada, Diego señaló: "Para mi en el contexto que se dio la lucha armada en argentina, creo que hubo un proceso revolucionario que creo que no terminamos de entender como tal. Sufrió una derrota dura pero fue un proceso revolucionario, en ese contexto era valido. La organización en la que yo milito se reivindica en la tradición de los movimientos de la izquierda peronista, nos sentimos hermanados, muchos de nuestros referentes fueron militantes de importancia dentro de Montonero y en ocasiones tenemos la posibilidad de hacer esa transferencia de experiencia y de escuchar en primera persona. Yo la reivindico. Nos costó mucho poder decir esto".
En este sentido, agregó: "Hay también una movida muy desbocada, como contrapartida hay una operación de deslegitimar no solo a la lucha si no también cualquier reivindicación que haya ahora. Tenemos una diputada que asumió jurando por las victimas del ´terrorismo subversivo´, tuvimos una vandalización en la Estación Rodolfo Walsh acá en Buenos Aires. Creo que antes jurar por las victimas del ´terrorismo subversivo´ hubiera tenido un costo político y hoy no lo tiene".
En otro orden, sobre su proyecto "Indómita Luz", Diego reflexionó: "Hablar de editorial militante es un sello medio pesado, generalmente las editoriales medianas y pequeñas son un poco militantes. La mayoría lo hacen teniendo otros trabajaos y se hacen por amor a lo libro que también es una forma de militancia, hay una militancia cultural enfocada a la producción cultural, el trabajo que hacen los artistas de todas las ramas, conocemos a los que llegan pero abajo hay un montón de gente que la rema".