Lucas Combina, director de 'Un crimen Argentino', dialogó con 'Club Lumiere' y se refirió a su película en relación a la cantidad de espectadores: "hay un retorno a las salas que es muy positivo. Primero levantó el teatro, la participación del público fue más espontánea ahí; pero de a poco, el cine está recuperando. En cuanto a las expectativas de esta película, en la primera semana estuvo entre las 4 ó 5 más vistas, y eso para nosotros es un número muy importante, una convocatoria muy buena. Se ubicó muy bien en Rosario porque la historia es de ahí y hay una cuestión de pertenencia para el público. En Buenos Aires mantuvo el número y estamos esperando el fin de semana donde seguramente algo más va a levantar."
Combina explicó por qué decidió llevar a 'film' la novela del periodista Sietecase: "el caso me pareció muy contundente, muy cruel. Pero también el marco en que se da esta historia fue muy importante para la película. El caso tomó un giro particular teniendo en cuenta el contexto de dictadura que se estaba transitando en la Argentina. Si bien era a fines de 1980 y nos estábamos acercando a la democracia, los militares seguían en el poder e incluso metiéndose en las instituciones judiciales y obviamente también en la Policía. Estos condimentos generan que sea 'Un crimen Argentino' y no otro tipo de crimen."
La historia visibiliza las fronteras borrosas del derecho y los excesos del Proceso militar, dejando ver una justicia funcional a las políticas de Estado. En un pasaje del libro, Sietecase define a la situación del juez de instrucción con la frase 'comprendía que estaba ante un tiburón atrapado por un cardumen de tiburones', a lo cual el director Lucas Combina agrega: "esta frase se dirige más a aquellos militares que trataron de buscar una verdad metidos en el Poder Judicial. Creo que el caso del juez Suárez (Luis Luque) era tratar de mantenerse rodeado de ese cardumen de tiburones porque, de alguna manera, ellos terminan siendo los héroes en el relato y también en la vida real. Esto lo digo en el sentido que tenían que aguantar hasta que viniera un juez que intentara hacer las cosas como correspondían, impidiendo que los militares tomaran el poder total de la justicia. La frase trata de mostrar a este tipo malo rodeado de otros tipos malos."
"Abrimos dos líneas de investigación: por un lado, el caso en sí mismo, incluyendo la posibilidad de contar con el expediente. Esto nos brindó muchos detalles. Y por el otro, la investigación de la época para poder generar la puesta en escena. Hay un montón de posibilidades para acceder al material de archivo y lógicamente también está la memoria. Pero a la vez, esto es un arma de doble filo, porque así como la tengo yo, la tienen todos. No hay que equivocarse porque está muy presente, es memoria viva y es parte de nuestra construcción como Nación y como individuos."
El elenco está formado por Nicolás Francella, Matías Mayer, Malena Sánchez, Luis Luque, Alberto Ajaka, Rita Cortese, César Bordón, y la participación especial de Darío Grandinetti: "fue una apuesta importante mezclar distintas generaciones de actores. Los consagrados, como Grandinetti, Rita Cortese, Luis Luque y Ajaka; y por otro lado, una generación nueva que ha demostrado estar muy a la altura. Resultó un contraste muy bueno entre ellos y los otros actores ya conocidos. Estoy muy contento con la experiencia que tuve con todos los actores."
Para finalizar, el director y guionista Lucas Combina sostuvo que "la película está muy buena para disfrutar en el cine. Después estará la posibilidad de verla en la plataforma de HBO MAX. El film fue pensado para la pantalla grande, con el detalle, la fotografía y esa calidad que puede apreciarse. Esto es una buena base para pasar luego a otro formato. Las plataformas brindan otra posibilidad, esa otra experiencia de ver la película en la casa. Se pierden cosas porque el cine brinda una proyección de primera calidad y una excelente calidad sonora. Al reducir todo esto, se pierde -lógicamente- algún detalle."