Flexas, uno de los dos intendentes radicales que participaron de la misa en Luján, explicó que tras el atentado a la Vicepresidenta “nos preocupa el clima político y social, no es solo el hoy sino hay que pensar en el futuro, porque no se pueden mantener los actuales niveles de tensión”.
Además sobre su asistencia mencionó que “fue una decisión individual porque nos invitaron como intendente. Fue una misa y el mismo obispo fue crítico, hasta pidió perdón por no haber hecho más invitaciones.
“Si hay algo positivo dentro de lo negativo de este hecho, es que hay que encontrar espacios de diálogo. No importa quién lo haga, si es la Iglesia o los dirigentes, pero hay que llevarlo adelante” subrayó.
No obstante, el dirigente de la UCR precisó que el radicalismo “tiene una tradición y un legado que hay que mantener, son las bases que se establecieron en 1983 y es estableciendo diálogo”.
En esta línea puntualizó que “el PRO es lógico, que al ser un partido nuevo, tenga posturas más extremas pero eso lleva a no poder generar construcciones colectivas. Cuando necesitemos de cambios profundos, vamos a necesitar del consenso de todos los partidos”.
Finalmente, en relación al mejor ámbito para encauzar el diálogo con el oficialismo indicó que hay que “dejar de lado lo partidario y hacerlo más institucional”.