En diálogo con Hijos de 30 Mil, el religioso contó sus sensaciones tras el encuentro de la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirhcner el pasado jueves en el senado de la nación.
"Lo viví como un encuentro religioso espiritural bien profundo, por supuesto que con sus implicancias políticas, pero fue Cristina la que en su primera aparición quiso hacerlas con curas y monjas que están con los más pobres, para dar garcias porque tiene la íntima convicción que está viva gracias a Dios y a la Virgen", sostuvo.
Luego desestimó versiones respecto a supuestas intenciones políticas de la Vicepresidenta generando el encuentro, diciendo "solamente la gente de mala fé puede darle el significado que no tiene, como por ejemplo algo que escuché de que era una idea diabólica, ponerla siempre como alguien que siempre está maquinando diabólicamente para dividir a la iglesia".
Por otra parte, reflexionó "lo que hoy llamamos discursos de odio se ha incrementato, y hay sectores de la dirigencia opositora que lo utiliza como su arma de construcción política. Alientan que esto ocurra y que los discursos de odio sean cada vez más en cantidad y profundidad. Pero si hay un grado de odio tan grande hacia ella, no por ser Cristina, sino por lo que ha hecho en nuestra patria que son beneficios para los pobres y maleficios para los ricos. Ella es la cara visible y quién sufre esta situación, pero clarísimamente quieren acabar con un proyecto nacional y popular".
Finalmente, contó que previamente a la reunión trabajadoras y trabajadores de los barrios le pidieron a Olveira que traslade saludos a Cristina.
"Recuerdo cuando le dijeron a Carlos Mujica que cuando fue a buscar a Perón iban miles de villeros con él, lo mismo pasó en la reunión con el jueves", concluyó.