El también decano de la Facultad de Ingeniería de la UNLP indicó que “esto permitirá darle un nuevo impulso de financiamiento para retomar las tareas. Algo que no se hacía desde hace varios años" y resaltó que la iniciativa “impacta muchísimo en la provincia de Buenos Aires, en Pipinas, donde está el polo espacial donde se construye y en Puerto Belgrano está la base futura para el lanzamiento de los satélites”.
El empresario dijo que esta obra permitirá “cerrar el círculo del desarrollo tecnológico aeroespacial porque Argentina hace sus propios satélites y los controla desde Córdoba pero faltaba ese escalón de no tener la necesidad de contar con un tercer país para acceder al lanzamiento”.
El también director del Centro Tecnológico Aeroespacial informó que ahora “construirán bancos de ensayos para los motores” y estimó que “para 2025 se podrán reactivar las pruebas de altura y luego de varios ensayos lanzar el Tronador II y poner un satélite en órbita”.
Y, en este punto, resaltó que “esto debe ser un proyecto de Estado porque es a largo plazo, se necesita de varios gobiernos de distinta identidad política. Lamentablemente, no sucedió de esta manera durante la gestión de Mauricio Macri”.
En este sentido, Actis recordó que “la reconversión de vehículos que realiza la UNLP es herencia de la parte espacial, como así también los radares en los distintos aeropuertos. Es darle desarrollo a la tecnología y darle valor agregado a nuestros recursos naturales”.
Actis destacó que “es importantísimo incentivar estos proyectos, porque esto no es el cohete de Alberto Fernández ni de Cristina Fernández sino de la Argentina. Muy pocos tienen la posibilidad de contar con un lanzador de satélites, son alrededor de 10 naciones”.