Con 29 años, y un impactante récord en Racing (su último club en Argentina) de 31 goles en 35 partidos, la delantera es protagonista de la primera transferencia rentada en la historia del fútbol local.
En diálogo con Gambeta de Dama, lamentó primeramente la derrota contra la Roma “fue un partido difícil, peleado, y nos hacen el gol en el último minuto”, dijo, al tiempo que manifestó sentir “un poco de decepción porque se aguantó muy bien el partido contra uno de los equipos más fuertes de esta liga, pero contenta por haber sumado minutos”.
Seguidamente expresó que desde el exterior “lo que destacan de los argentinos es la garra que tenemos allá, es lo que buscan. Pero tienen otro estilo, otra forma de trabajar, es más físico todo. Si bien en Racing corríamos y el trabajo físico era el mejor, acá se usa mucho más”. En ese sentido, se explaya “hay mucho roce, los entrenamientos son duros, obviamente que uno no va a lastimar a una compañera pero te tenés que hacer fuerte en los entrenamientos, y no estoy acostumbrada a eso. Yo prefiero frenar aunque sea un mínimo choque, acá tenés que chocar, te levantás y no importa, no es que se va con mala leche, acá se entrena así”.
Rocío comparte plantel con jugadoras que también llegaron al Sassuolo desde otros países como Hungría, Bulgaria, Escocia, Dinamarca y Sudáfrica.
“Ni bien me llegó la oferta vine, no pensando que era la goleadora de Racing, soy una más, tengo que ganarme un lugar como siempre hice. Es difícil porque vengo de un club donde hacía goles, jugaba todos los partidos. Me estoy amoldando a lo que es el juego”, contó, y explicó que en el esquema táctico del Sassuolo tuvo que cambiar de funciones respecto a su etapa en Racing, donde “jugaba bien de 9 de área. El DT juega con dos puntas, no con un 9 de área, entonces no son los mismos los movimientos. Tengo que desmarcarme, amagar e ir al espacio. La mitad del equipo es nuevo y nos estamos adaptando, quizás nos tocaron muchos equipos fuertes al comienzo, pero todo tiene una vuelta de rosca y se va a poder”.
Finalmente, tras afirmar “sigo sin creer lo que pasó, irme de Racing fue bastante doloroso para mí porque fue el club que alzó mi carrera, llegué al punto máximo. Sé que es un precedente que se marca y si bien es un hecho histórico tenemos que normalizar”, y recomendó a las jugadoras que están iniciando su carrera no acelerar los procesos diciendo “mi consejo es que a veces tenés que hacer bien tu camino, ser consciente de todo, disfrutar cada momento porque irte afuera no es fácil. Hay muchos que te venden ilusiones que no son, tenés que ir paso a paso sin quemar etapas, averiguar a qué club vas a ir, cómo, dónde, si podes hablar el idioma” ya que “es difícil comunicarse. Estar sola y lejos no es fácil”.