El periodista e historiador expresó que la muerte de Hebe "nos deja más vulnerables a todos. Es la respuesta a una de las tragedias más grandes que tuvo el país. Ella transformó el luto a partir de su salida de la casa a la plaza. Desde el principio fue polémica porque denunció un genocidio que buena parte de la sociedad callaba y tuvo que gritar más fuerte de lo que podía".
"Cuando escribimos su biografía ella me dijo que no la pinte como una heroína, porque sabía sobre su complejidad y contradicciones. Se equivocó muchas veces, pero, fue una mujer que estuvo hasta los 48 años en su casa y se vio obligada a salir a buscar sus hijos y no tuvo descanso", afirmó.