En diálogo con Hijos de 30 Mil, la también sobreviviente al genocidio de 1976 y ex detenida política, dijo sentirse “conmovida por el alejamiento de Hebe, pero también por la respuesta de la gente, de las generaciones. Me ha encantado escuchar o leer personas que jamás conocí que tienen un conocimiento tan profundo de las Madres”.
Al referirse a la influencia de Madres de Plaza de Mayo en su historia personal, describió “comencé de militar en dictadura cuando todo era espantoso y frío. Yo fui secuestrada cuando las Madres ya existían, y cuando salí de estar detenida tuve la sensación de como cuando estás en una pileta y de a poco vas saliendo, pasos y pasos hasta encontrar la luz y el aire. Eso para mí fueron las Madres”.
Sobre el rol estratégico de la formación y la educación que llevaron a las Madres a fundar la Universidad que la tuvo como Directora, expuso “las Madres pensaron que era muy importante para la continuidad de las luchas la formación de cuadros políticos y el conocimiento como herramienta de liberación. Toda la experiencia de la Universidad con los vaivenes y debates políticos, con el tiempo se va a valorar mucho más”.
Seguidamente, puntualizó sobre la figura de Hebe de Bonafini diciendo “ella significa la inteligencia política, el saber popular, la fuerza de las mujeres. Valoro mucho la inteligencia y la claridad política de Hebe como producto y como saber del pueblo. Ella venía de El Dique, se nutrió de todas las luchas y de esa clase trabajadora de la cuál provino donde hay experiencias y enseñanzas que tal vez no se aprenden en la universidad. No hay que pensarla sola, ella se logró gracias a las Madres que la rodearon”.
