Seguido, explicó que “ese procedimiento, esa estrategia de proscripción no es nueva, la comenzaron a pergeñar después del 9 de diciembre en que nos despedimos en la plaza y cantábamos “volveremos”. Lo primero que hicieron fue armar un juicio con denuncias y con una cronología electoral casi quirúrgica”.
En esa línea, comparó la lectura de los fundamentos de su condena del 9 de marzo próximo con la proscripción del peronismo en el año 1956 y explicó: “El 9 de marzo van a leer los argumentos de la proscripción, un 9 de marzo de 1956 se publicó el decreto por el cual se prohibía decir las palabras Perón, Evita y se prohibía cantar la marcha peronista. Este es el tema de la proscripción, que es fundamentalmente un acto de disciplinamiento hacia el conjunto de la dirigencia, para que nadie se vuelva a animar a tanto, a recuperar las AFJP, YPF o sancionar la Ley de Medios o mejorar la distribución de los ingresos”.
Asimismo, agregó “Cuando uno decide mejorar la distribución del ingreso afecta intereses, genera resistencias, molestias y represalias. El miedo es un gran disciplinador y frustrador de la dirigencia política y de las sociedades. Pulveriza el poder popular y tiende a que aparezca lo que yo denomino la insatisfacción democrática, donde la política termina siendo algo que a la gente no le gusta porque no le soluciona los problemas. Es una coartada maravillosa”.
Por otro lado, la exmandataria se refirió al conflicto por la coparticipación y recordó que Mauricio Macri “modificó con un decreto simple lo que le tocaba al Gobierno nacional de coparticipación y le dio muchísimo a la Ciudad de Buenos Aires, la más rica de la Argentina. Luego, esto que había sido criticado por todos los gobernadores fue resuelto por otro decreto de Alberto Fernández, pero no quedó sólo en un decreto simple: hubo una ley que consagró esa nueva distribución del ingreso, sin embargo la Corte hizo caso omiso de una ley”.
En ese marco, manifestó que el máximo tribunal “sólo puede declarar inconstitucional a una ley, pero no suspenderla. Pero no hicieron sólo eso, sino una incursión en el Poder Legislativo” y denunció: “Es como que hubiera desaparecido el Estado de derecho, puede parecer una discusión entre dirigentes, pero créanme que este partido judicial está influyendo en la calidad de vida de todos los ciudadanos” y remarcó que “hay que despabilarse porque cuando te arrancan la cabeza con la factura de internet o celular es porque un juez hizo lugar a un amparo”.
Además, destacó que "lo que está pasando en la Argentina no es en contra de mí, sino en contra del peronismo. Le van a incrementar a CABA lo equivalente a 6 presupuestos de la localidad de Avellaneda”.
Por lo tanto, Cristina Fernández llamó a la población a “advertir lo que está pasando. Cada compañero, cada dirigente y cada militante tiene su bastón de mariscal en la mochila: sáquenlo y no le pidan permiso a nadie”.
También, recordó que “durante la pandemia, cuando las sesiones se hacían por Zoom echaron a un diputado porque le besaba una teta a la novia, era un acto impropio. No lo justifico, pero lo echaron. Hay una patente de impunidad para todo aquel que no sea peronista”. Seguido, cuestionó: “Me parece que deberíamos preguntarnos todos ¿Es sostenible un país con estos parámetros en la administración de justicia? Seguramente no. Es necesario de que, más allá de que a todos nos gustan las redes, salir a hablar y explicar. Tomar contacto con la realidad, la gente está ávida de que le expliquen”.
Por último, la Vicepresidenta enfatizó: “Una fecha como el 24 de marzo próximo, que se cumplirán 40 años de democracia tenemos que movilizarnos bajo una consigna: Argentina y democracia: sin mafia”.